ANTE LA SOMBRA VIRJEN
Siempre yo penetrándote,
pero tú siempre virjen,
sombra; como aquel día
en que primero vine
llamando a tu secreto,
cargado de afán libre.
¡Virjen oscura y plena,
pasada de hondos iris
que apenas se ven; toda
negra, con las sublimes
estrellas, que no llegan
(arriba) a descubrirte!
lunes, 8 de febrero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario